27 de febrero de 2015

Voy a confesarte...



Volvimos a vernos como cada noche:
 tú como siempre,
deslumbrante, bella e iluminada;
Yo como nunca, 
ilusionado y más vivo que nunca.
[...]


- ¿Puedes recordar qué fue lo que sentiste cuando te enamoraste por primera vez? 

+ Yo, que apenas recuerdo los últimos 50 años, ¿cómo puedo recordar 
cuándo me enamoré, ni siquiera cómo supe que era amor...?

- Entonces, ¿cómo puedes saber que aún lo estás?

+ Porque no hay nada más fuerte que el amor. No hay nada que te haga
volver al mismo lugar tantas veces, por alguien.

- Sin lugar a dudas. 

+ ¿Y por qué tanta duda?

Porque no se si tan sólo es querer, o es amor... 
 Esa persona que uno no espera llegarse a encontrar jamás, porque piensa que es 
tan imposible encontrar alguien tan... tan así como uno mismo. 
 Porque hay veces que me veo con tanta fuerza de seguir, que podría tirar de la 
misma Tierra, y otros momentos en los que ni siquiera podría llevar mi cabeza 
sobre los hombros. 

+ Sabes bien que soy tu fiel compañera, que jamás he dado nada por imposible
porque no hay imposibles en el amor. Por eso no puedo negar 
que tu confesión no sea tan real como lo sientes, aun sin saber la más
mínima idea de cuanto tienes ahí dentro guardado para
entregar.

- Ya le entrego todo lo que está en mis manos, al menos cuando la he sentido 
mía por momentos, porque lo he sentido, y eso ha hecho temblar mis cimientos.

Un silencio mínimo, seguido de un suspiro 
interrumpió el momento.

+ ¿Por qué suspiras tan profundo?

- Porque me supera.

+ ¿El qué? Y perdona tanta pregunta...

- Me supera el querer tenerla cerca cada instante; 
me supera el querer saberla libre, pero mía; 
me supera todo lo que tengo aquí guardado para compartir a su lado; 
me supera el tenerla y a la vez no tenerla...
 Me supera el haber oído de su boca, el haber sentido en su piel, 
el haber visto en sus ojos... Eso que en los míos se refleja. 
 Es mi debilidad.

+ No te rindas.

- No lo haré. 

+ No pierdas esperanzas.

- Jamás la perderé. 

+ No dejes de luchar. Sería un error
rendirse ahora, o simplemente rendirse ya es un error. No lo permitas.

- ¿Rendirme? Es en lo único que no se me ha pasado por la cabeza, 
en lo último que podría permitirme.

+ Debo irme, el sol se acerca y yo he de seguir mi camino. Volveremos
a encontrarnos, no lo dudes. Siempre estaré aquí cada noche. 

Y como si de una hoja de papel que cae al suelo, 
se marchó por el horizonte, para dejar paso al día, y con él
a la vida, dejando atrás la noche de sueños, y deseos.






@alvaro_didier

9 de febrero de 2015

Alguien como tú.

Hace unos días pasó por mi ventana alguien a quien esperaba desde hace mucho, ella quien me ilumina en las noches. Hacía mucho tiempo que no coincidíamos en mi ventana, y esta fue la adecuada. 

Sin hacer alusiones al tiempo pasado, hablamos como de costumbre, y me contaste algo que, de una forma u otra, podía imaginar.

Sin una pregunta directa, empezaste a contarme tus secretos, esos que nunca habías declarado a nadie, tus más íntimas historias jamás contadas. 

Y me reconociste un amor que ves en lo más lejano a ti.

No es otro amor que a quien ilumina tu cara siempre, quien sin pedirte nada a cambio, te da toda su luz para que brilles con hermosura y todos puedan apreciar la belleza de todo tu ser. 

No podía ser otro que ÉL.


Lo que no sabías era que él también me había hecho confesiones que no sabías. 

Me contó un secreto, y es que él la amaba locamente. 
Sin decírselo, sin mostrarse; únicamente entregándole todo lo que tenía e intentando tenerla lo más cerca posible, pero ella, mi Luna, lo evitaba.


[~ Yo ya estaba loco antes de ti, tú sólo has aparecido para no hacerme sentir tan loco. ~]